En un evento como este, que tal vez esté considerado el mayor del año (no me atrevo a decir de la década), con unos invitados de tan alto postín, uno pensaría que los que allí acudieron iban a escoger sus mejores galas. El caso es que siempre hay alguien que nos deleita con su mal gusto. Aquí les va nuestra selección. ¡No se pierdan las peor vestidas de la Boda Real Británica!
VICTORIA DE SUECIA
Yo no sé en qué estaba pensando Victoria cuando se enfundó semejante horror de vestido. ¿Cómo ha podido ir tan vulgar a la boda del año? Con un entalladísimo traje color salmón anaranjado que nada deja a la imaginación debido a lo fino que es el tejido, se ha presentado en la Abadía como si fuera a un cóctel en Ibiza.
EUGENIA Y BEATRIZ DE YORK
Las princesas Eugenia y Beatriz se han pensado que iban al concierto de Lady GaGa en vez de a la boda de Kate y William. Las hijas de Sarah Ferguson y el príncipe Andrés han ido horribles no, lo siguiente. Quiero pensar que lo han hecho adrede para acaparar las portadas de los tabloides con sus modelitos imposibles y sus exagerados, horrendos y vulgares tocados porque… ¡tan mal gusto no pueden tener Dios!
TARA PALMER – TOMKINSON
Como no, la ‘socialité’ estaba invitada a la fiesta y ¡ ha venido! Ha entrado a la Abadía justo a la par que el matrimonio Beckham y claro, las comparaciones son odiosas. A su lado, un esperpento extraño se paseaba cual ente… ah no, ¡Es Tara!
REINA ISABEL II
¡Amarillo! ¡No digo más! La Reina ha elegido un vestido amarillo para la boda de su nieto, ¿Les parece normal? A mi no, desde luego. Supongo que Isabel quería ser el centro de las miradas en su familia y con este inusual color, se lo aseguraba. Desde luego, lo ha conseguido.
MARIA TERESA DE LUXEMBURGO
Además, las perlas la hacen más arcaica y mayor todavía. Lo mismo pasa con los complementos en color marrón que no pegan ni con cola ya sea el bolso, o los guantes. Sobraban por mal conjuntados.
Lo que se salva un poquito de su mediocre atuendo es la pamela que, a pesar de ser básica y sin mucha floritura, al menos es un poco estilosa debido a la flor azul que luce. Aunque, ¿ese azul, con qué pega? ¡Que alguien me lo explique!
VICTORIA DE SUECIA
Yo no sé en qué estaba pensando Victoria cuando se enfundó semejante horror de vestido. ¿Cómo ha podido ir tan vulgar a la boda del año? Con un entalladísimo traje color salmón anaranjado que nada deja a la imaginación debido a lo fino que es el tejido, se ha presentado en la Abadía como si fuera a un cóctel en Ibiza.
Las princesas Eugenia y Beatriz se han pensado que iban al concierto de Lady GaGa en vez de a la boda de Kate y William. Las hijas de Sarah Ferguson y el príncipe Andrés han ido horribles no, lo siguiente. Quiero pensar que lo han hecho adrede para acaparar las portadas de los tabloides con sus modelitos imposibles y sus exagerados, horrendos y vulgares tocados porque… ¡tan mal gusto no pueden tener Dios!
TARA PALMER – TOMKINSON
Como no, la ‘socialité’ estaba invitada a la fiesta y ¡ ha venido! Ha entrado a la Abadía justo a la par que el matrimonio Beckham y claro, las comparaciones son odiosas. A su lado, un esperpento extraño se paseaba cual ente… ah no, ¡Es Tara!
REINA ISABEL II
¡Amarillo! ¡No digo más! La Reina ha elegido un vestido amarillo para la boda de su nieto, ¿Les parece normal? A mi no, desde luego. Supongo que Isabel quería ser el centro de las miradas en su familia y con este inusual color, se lo aseguraba. Desde luego, lo ha conseguido.
MARIA TERESA DE LUXEMBURGO
Además, las perlas la hacen más arcaica y mayor todavía. Lo mismo pasa con los complementos en color marrón que no pegan ni con cola ya sea el bolso, o los guantes. Sobraban por mal conjuntados.
Lo que se salva un poquito de su mediocre atuendo es la pamela que, a pesar de ser básica y sin mucha floritura, al menos es un poco estilosa debido a la flor azul que luce. Aunque, ¿ese azul, con qué pega? ¡Que alguien me lo explique!
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