¿Pérdida de deseo? No, gracias



¿Cuáles son las claves del deseo y del placer en una relación de pareja?

Sylvain Mimoun: En la pareja, el deseo, tanto sea al principio como con el tiempo, se mantiene siempre y cuando exista un “egoísmo compartido”. Es decir, para que funcione, debemos pensar en nosotros mismos y no en el otro. Por supuesto que no está mal pensar en el otro. Sin embargo, si pensamos tanto en él hasta el punto de olvidarnos de nosotros mismos, estaremos acabando con nuestro placer personal. Y cuando esto ocurre, es decir, si no sentimos placer, tampoco se lo estaremos dando a nuestra pareja.

¿Por qué a algunas mujeres les cuesta dar y sentir placer?

Sylvain Mimoun: Una mujer obsesionada por la misma cuestión: ¿se aburre conmigo?, ¿estará sintiendo placer?, ¿lo estaré haciendo bien?... no conseguirá sentir placer ni tampoco dárselo a él. Estará tan obcecada por la angustia que será incapaz de pensar en sí misma y, por tanto, de obtener placer. Y no olvidemos que si no conseguimos disfrutar nosotros mismos, también le estaremos robando ese placer al otro.

Por el contrario, si ella no piensa en él, sino en su propio placer y consigue manifestarlo, ambos disfrutarán del momento y obtendrán placer. Esto es algo que pocas personas hacen y que, sin embargo, es indispensable.

¿Es la búsqueda de placer igual de problemática para el hombre?

Sylvain Mimoun: Por lo general, los hombres saben arreglárselas. Es decir, en teoría, el simple hecho de tener relaciones les proporciona placer.

¿Qué hacer cuando el deseo de uno es diferente al del otro?

Sylvain Mimoun: En una pareja, es frecuente que la mujer y el hombre funcionen de maneras diferentes.

Por ejemplo, a menudo él prefiere el sexo directo, incluso salvaje, y ella se inclina más por los encuentros románticos. Estas diferencias pueden hacer que choquen continuamente. Él pondrá su granito de arena romántico al final, una vez haya llegado al orgasmo. Sin embargo, si no hay romanticismo, no habrá orgasmo para ella. Si consiguen entenderse y conocerse bien el uno al otro, la solución consistirá en que unas veces sea él quien ponga las reglas de su juego y otras, ella. De este modo, la relación puede funcionar perfectamente.

¿Por qué el placer se desvanece con el paso de los años?
Sylvain Mimoun: Tenemos que olvidarnos de esa idea preconcebida. Que el deseo acaba por desaparecer con el tiempo es totalmente falso. Conozco parejas que llevan juntas más de treinta o cuarenta años y que continúan experimentando deseo el uno por el otro, tanto la mujer como el hombre. Así que es posible.

Por desgracia, cada vez me encuentro con más parejas que me dicen: “Es normal que tengamos menos ganas, llevamos juntos tres años”. ¡Pensar eso es un error! En efecto, las cosas no son iguales el primer día que al cabo de tres años, pero no hay razón para que no tengamos ganas del otro. Para mantener el placer hay que alimentarlo. Si él tiene en cuenta las necesidades de ella, lo que desea, lo que la hace feliz, tiene más posibilidades de que ella responda de manera positiva. Si ella responde de manera positiva estará aumentando el deseo de su hombre. Esta es una regla que funciona tanto en un sentido como en el otro.

El deseo implica compartir y buscar el placer de manera egoísta pero, ¿cómo lograr esta reacción química tan complicada?

Sylvain Mimoun: La vida es complicada. Si buscamos el orgasmo, debemos concentrarnos en nosotros mismos. Para mantener la llama del deseo, hay que pensar en el otro.

Comentarios