Además de ser un postre muy apetitoso y más en estas fechas en las que se hace sentir con fuerza el calor, la fruta puede convertirse en un perfecto elemento decorativo para tu enlace.No, no nos hemos vuelto locos. Escoger centros de mesa y otros elementos decorativos en los que la fruta sea la protagonista, puede ser la fórmula perfecta para conseguir una decoración diferente y original en tu boda. ¿Quieres ver algunas ideas?
La tarta nupcial puede ser otro elemento clave para introducir la fruta. En lugar de decorarla con merengue o con el tan de moda fondant, prueba a buscar una tarta distinta, de esas que conseguirán a la vez sorprender y que tus invitados se chupen los dedos. Las fresas, los kiwis o las cerezas son solo algunas de las frutas que te pueden ayudar a lograrlo.
Y si lo que buscas es una decoración a medio camino entre lo rústico y lo vintage, te puedes ayudar de las frutas para rellenar antiguas cajas de madera o cestas que le darán un toque distinto a tu enlace. Incluso puedes utilizar hortalizas teñidas de colores para dar un toque distinto a tu decoración de boda.
Tampoco pierdas la oportunidad de situar una pieza de fruta en lugares estratégicos como la mesa en la que sitúes el libro de firmas o la Candy bar, que puede incluso convertirse en una fruit bar con banderitas de fruta que harán las delicias de todos tus invitados.
Y es que con un poco de imaginación, se puede dar un toque diferente y fresco a una boda. ¿Qué esperas para hacer lo mismo con la tuya?
La primera gran apuesta para decorar con frutas en tu boda viene en los centros de mesa. ¿Por qué emplear los típicos centros de flores cuando puedes sustituirlas por coloridas frutas? Manzanas de diferentes colores, granadas, naranjas e incluso melocotones y fresas pueden ser buenos elementos decorativos para tu centro de mesa e incluso para tus meseros. Solo tienes que combinarlos con originalidad y frescura y conseguirás sorprender a todos en tu boda.
La tarta nupcial puede ser otro elemento clave para introducir la fruta. En lugar de decorarla con merengue o con el tan de moda fondant, prueba a buscar una tarta distinta, de esas que conseguirán a la vez sorprender y que tus invitados se chupen los dedos. Las fresas, los kiwis o las cerezas son solo algunas de las frutas que te pueden ayudar a lograrlo.
Y si lo que buscas es una decoración a medio camino entre lo rústico y lo vintage, te puedes ayudar de las frutas para rellenar antiguas cajas de madera o cestas que le darán un toque distinto a tu enlace. Incluso puedes utilizar hortalizas teñidas de colores para dar un toque distinto a tu decoración de boda.
Tampoco pierdas la oportunidad de situar una pieza de fruta en lugares estratégicos como la mesa en la que sitúes el libro de firmas o la Candy bar, que puede incluso convertirse en una fruit bar con banderitas de fruta que harán las delicias de todos tus invitados.
Y es que con un poco de imaginación, se puede dar un toque diferente y fresco a una boda. ¿Qué esperas para hacer lo mismo con la tuya?
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