10 cosas que nadie te cuenta sobre los preparativos de la boda

Tu pareja por fin se ha declarado, tú has dicho que sí y ahora llega ese momento que tanto estabas esperando: el de comenzar con los preparativos de la boda, algo deseado y temido a partes iguales por las futuras novias. Y es que, una vez que empiezas a organizar tu enlace descubres que no todo es tal y como tú te lo habías imaginado y que hay muchas cosas que están ahí, aunque nadie te las había contado hasta ese momento. Hoy te mostramos esa cara B de la que nadie habla durante los preparativos de las bodas. ¡Toma nota!


Foto: La Paire de Cerises.
1.-Cerrar un número de invitados no es tan fácil como parece: Seguramente pienses que cerrar la lista de invitados a una boda es algo “más o menos” sencillo. Tú entregas una invitación y la gente te confirma ese mismo día o poco después. ¡Pues no! Eso que tú pensabas que sería coser y cantar se convertirá con algunos de tus invitados en una especie de misión imposible. Ármate de paciencia y, sobre todo, estate preparada para modificaciones de última hora en la lista.
2.- Acabarás hablando más de la boda de lo que creías: Casi todas las novias piensan que no van a convertirse en unas locas de los preparativos y que este no va a ser su único tema de conversación hasta que llegue el gran día. Lo cierto es que solo unas pocas lo consiguen. Antes de que te des cuenta te encontrarás hablando constantemente de tu boda y de lo que te ha dicho uno u otro proveedor, buscando problemas incluso donde no los hay. Tranquila, no eres una excepción. De hecho, lo extraño sería que no te sucediera.
3.- Cuesta el mismo trabajo preparar una boda para 200 que para 50: Aunque creyeses que tu boda íntima era la mejor opción para no complicarte, pronto te darás cuenta de que los pasos para organizarla son iguales a los de una boda con muchos invitados y que las cosas que tienes que decidir son prácticamente las mismas.

Foto: Flo Moncenis photographie
4.- Todo el mundo te dará su opinión sobre lo que tienes que hacer (sobre todo si no la pides): Otra de esas realidades que descubres cuando preparas tu enlace. Al parecer todos tus amigos tienen un máster como wedding planners y saben perfectamente, mejor que tú incluso, lo que debes tener en tu boda. La paciencia volverá a ser aquí tu mejor aliada.
5.- Conceptos como “rústico”, “clásico” o “romántico”, se convierten en algo tremendamente subjetivo: A la hora de buscar la mejor opción para la decoración de tu boda te darás cuenta de que estos términos no significarán lo mismo para ti que para tus proveedores. En estos casos, llevar muestras de lo que quieres es lo más fácil para resolver el problema.
6.- Tu madre y tu suegra tienen mucho que decir al respecto: Puede que también en otros aspectos de tu vida suceda esto, pero por alguna razón se creen con más derecho aún a opinar cuando preparas tu enlace. Escucha sus propuestas pero déjales claro que la boda es tuya y que serás tú la que tendrá la última palabra a la hora de tomar cualquier decisión.

7.- Al menos habrá un gasto imprevisto que acabareis por asumir: Puede que esté relacionado con un incremento en el precio de tu vestido de novia frente al que tú habías pensado, con gastos de la decoración o con algún elemento de última hora que quieras incluir, pero lo cierto es que siempre hay algo que acabas asumiendo aunque al principio no contases con ello.
Foto: Mathew Morgan.
8.- Descubrirás que a tu chico, de pronto, le preocupan cosas que nunca imaginaste, como el color de las flores o el mantel: Sin embargo, será incapaz de formarse una opinióno ayudarte a decidir sobre otras que a ti te parecerán mucho más importantes.

9.- Al menos habrá una vez en la que perderás los nervios: No te preocupes, a todas las novias les pasa mientras preparan su boda. Lo mejor que puedes hacer es desear que sea en un momento en el que estés a solas para que nadie vea lo mucho que los preparativos te están afectando.

Foto: Harmony Loves.
10.- Llegará un momento en el que pienses que lo mejor hubiera sido no casarte:Coincidiendo con el pico de estrés del que acabamos de hablarte, quizá haya momentos en los que pienses que haber apostado por una boda es un error y que habrías sido mucho más feliz fugándote con tu chico o haciéndote pareja de hecho. No te preocupes: todas las novias tienen ese pensamiento en algún momento del proceso.
Y es que, aunque la preparación de la boda sea un proceso precioso lleno de buenos momentos, no debemos olvidar que también es largo y, en ocasiones, estresante para la novia. ¡Trata de disfrutarlo al máximo y de que los momentos malos sean los menos!

Comentarios

Publicar un comentario